top of page

El nacimiento de la luz 



Las luces llenan las ciudades del mundo que se ilumina en un deseo incontenible de luz. La tierra, vista desde el espacio infinito, está repleta de millones y millones de puntitos luminosos como luciérnagas que van y vienen enloquecidas. 

 

Luz que el ser humano busca desde los inicios de los tiempos. Era luz lo que irradiaban las hogueras de nuestros ancestros, era la luz atravesando el cielo en el carro del sol, en el repetitivo rito de salir por el este y ocultarse por el oeste, marcando la duración de los días y las noches. 


Luz que ilumina las Saturnalias romanas en el momento que prolonga  por más tiempo su fulgor, la luz de Eleusis que ilumina a los iniciados en ese camino a través de la vía sagrada; luz de la zarza ardiente que deslumbra al  profeta, luz de Pentecostés, generadora de sabiduría, luz de transfiguración del hombre en Dios, luz de estrella que guía a los magos de Oriente hasta el pesebre del Niño, unión de lo antiguo y lo nuevo, fuente de amor y esperanza que ilumina nuestros corazones en la Navidad por los siglos de los siglos. 

 

1 visualización0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

Comments


bottom of page